Yoga para la belleza

4. Postura del perro mirando hacia abajo

Técnica:

  • Ponte a cuatro patas.
  • Coloca las palmas de las manos en el suelo, paralelas entre sí (con los dedos separados) a la altura de los hombros. Póngase de pie con los pies separados a la anchura de la cadera, en línea con las manos.
  • Levanta lentamente la pelvis hacia arriba, enderezando los brazos y las piernas.
  • Asegúrate de que la columna vertebral está enderezada y la postura es correcta: el cuerpo debe formar un triángulo, con la pelvis en la parte superior.
  • Ponga los talones en el suelo gradualmente, los principiantes pueden hacer el ejercicio de puntillas.

Realice en las etapas iniciales durante no más de 30 segundos.

Acción: promueve un flujo sanguíneo adicional a la cabeza, lo que acelera la entrega de nutrientes al cuero cabelludo y a la cara, y una retirada más rápida de los productos de descomposición.

Beneficio: aumenta la turgencia de la piel, reduce el acné y la pigmentación.

Contraindicaciones: hipertensión, trastornos del túnel carpiano, embarazo tardío, dolores de cabeza.

5. Doblar

Técnica:

  • Ponte de pie, con las manos hacia abajo y los pies juntos.
  • Al exhalar, inclínese hacia adelante y coloque los dedos de los pies en el suelo. A continuación, mueve las manos y presiona las palmas contra la esterilla a ambos lados de los pies. No doble las piernas por las rodillas.
  • Respira de manera uniforme y profunda.
  • En la siguiente inhalación, levanta las manos del suelo y vuelve a la posición inicial.

Haga esto durante un minuto como máximo.

Acción: masajear los órganos internos, mejorar la salida venosa y linfática y suministrar sangre fresca, rica en oxígeno y nutrientes.

Efecto: aumento del suministro de oxígeno y nutrientes a las células de la piel, que combaten los radicales libres y aceleran la regeneración.

Contraindicaciones: lesiones de espalda y rodilla, presión arterial alta y baja, trastornos circulatorios cerebrales, embarazo.

6. Postura de gato

Técnica:

  • Colóquese a cuatro patas, con las palmas de las manos debajo de las articulaciones de los hombros y los dedos bien separados.
  • Al inhalar, levante lentamente la cabeza, inclínela hacia arriba y arquee la espalda, exponiendo el pecho.
  • Al exhalar, arquea la espalda, empezando por la pelvis: el coxis hacia abajo, redondea la espalda, los omóplatos hacia arriba, mete la barriga, la cabeza hacia abajo.
  • Puedes realizar una asana básica o hacerla más difícil.

Realice 10 veces.

Acción: aumentar la flexibilidad y la movilidad de la columna vertebral, y masajear los órganos internos.

Efecto: alivio del dolor y la rigidez en la columna torácica y cervical, estiramiento y estimulación de los nervios espinales, lo que supone un mejor flujo sanguíneo y linfático hacia la cabeza y la activación de los procesos necesarios en la piel.

Contraindicaciones: ninguna.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *